EL PERFUME
Por lo general una de las cosas que pasan desapercibidas al ser humano es el perfume corporal, no el hedor del cuerpo del que no se asea, pero sí los diferentes efluvios que producen las distintas partes del cuerpo según las sensaciones que se sienten, aunque gran parte de culpa lo tienen los perfumes que nos empeñamos en poner a nuestros cuerpos, este poema intenta realizar una mezcla entre los aromas corporales y los sentimientos, llevándolo incluso al lenguaje de los recuerdos y añoranzas de otros tiempos.
Cada etapa de tu vida
tuvo diferente olor,
no por todas conocidas
se llegan a percibir.
Mas habiendo conocido
este momento de ti,
cierro mis ojos y sueño
y los voy sintiendo en mí.
Cada parte de tu cuerpo
tiene diferente olor,
que cambia constantemente
cuando te tengo ante mí.
He percibido a tus años,
el aroma virginal
como un efluvio vehemente
que se escapara de ti
que me decía insistente
nada yo se del vivir.
He percibido en tu boca
el aroma que despierta
la pasión incontenible
que la locura provoca.
He percibido en tus manos
el olor de la ternura
cuando derraman dulzura
en las caricias que dan.
He percibido en tu piel
el olor de una pradera
cuando empieza a amanecer.
He sentido en tu cabello
un aroma de destellos
que reflejaba ilusión.
Luego, he percibido tu olor,
cuando se mezcla conmigo,
aroma acre y dulzón,
olor de fuerte sentido
que inunda la habitación
gritando a nuestros sentidos
que fuimos los dos felices
por haber hecho el amor.