Pocas personas en este mundo me han visto llorar. Ninguna me ha visto hacerlo de dolor o tristeza, pues cuando he sentido un amargo dolor o una profunda tristeza he buscado la soledad y si he tenido que llorar como desahogo a mis sensaciones, lo he hecho sin que nadie lo viera. Cuando alguien me ha visto llorar ha sido por alegría, ternura, amor o cualquier otro sentimiento que no me ha importado compartir.
El dolor y la tristeza son míos y su llanto no estoy dispuesto a compartirlo con nadie, ni tan siquiera con el o la causante. He llorado muchas veces y lo volveré a hacer, pero en silencio y para mi.
LÁGRIMA SECA
Noche que pasas serena,
vida mía turbulenta,
sueños que mi paz inquietan
cuando cerrando mis ojos
embargado por recuerdos
fluye una lagrima seca,
como se puede llorar
cuando tanto se lloró
que ya no queda materia.
No se llora por tristeza,
a mis años ya no ocurre,
se llora por la ternura,
se llora por el amor,
se llora por la dulzura
de unos ojos al mirar,
se llora porque se llora
sin tener explicación,
nada importa que en los ojos
secos de tanto llorar
no te queden tan siquiera
unas gotitas que echar,
cuando llora, llora el alma,
pues si llorando los ojos
no rezuma el sentimiento,
no se estremecen las carnes,
no palpita el corazón,
no es llanto, solo teatro,
que nos dedica un actor.
