Sé que he vivido, y además profundamente, sin perderme en los temores, sin andarme con rodeos, sin temer las consecuencias. Dulce o amargo, triste o alegre, me dio lo mismo. Lo afronté, lo sentí y puse todo mi empeño en poderlo disfrutar. Dicen que el amor es bello y atestiguo que es verdad, pero ya no estoy de acuerdo cuando dicen desamor, es un adjetivo extraño que en realidad no se da. Se ama, se odia, o guardándolo en secreto se sigue amando en el tiempo, y si se llegara el caso y analizamos el odio, es que en el fondo se ama y no se puede evitar, e intentan que el mundo crea que ya dejaron de amar.
¡VIVO!
Quiero gritar que he vivido,
he reído, he llorado,
he amado y disfrutado.
He sentido tanto miedo
que el sudor manaba
estando helado mi cuerpo,
He sufrido tanto daño
que llegué a rogar la muerte
para alcanzar el descanso.
He amado con locura
hasta olvidarme de mí
renunciando a mi sentir
para yo hacerla feliz.
He cantado emociones
que fui arrancando del alma
que haciendo que alguna gente
llorara con sentimiento,
riera con alegría,
o se olvidara del tiempo.
He muerto o estado a punto
tantas veces que ni recuerdo,
he sentido que la vida
se me iba entre los dedos.
Mas, sonreí, estuve entero,
y no quise despedirme
porqué odio que me lloren
pues quiero que cuando muera
los poquitos allegados
recuerden de mi lo bueno.
Ya que si es cierto que existe,
cuando yo llegue al infierno
lo malo que yo haya hecho
me llenará de recuerdos.